Hace años hice mi propio ritual para dejar
atrás los bloqueos o dificultades y potenciar las cosas o actitudes que
quería que siguieran conmigo en el futuro. Me funcionó y es por eso que he querido compartir los detalles aquí, para aquellos que tienen la fe suficiente para transformar su vida con ayuda de ejercicios simbólicos.
DESCRIPCIÓN DEL RITUAL QUE HICE
DESCRIPCIÓN DEL RITUAL QUE HICE
Escribí en unos papelillos el nombre de las personas de las cuales quería
separarme o no ver más y también escribí las cualidades o actitudes que
no me estaban ayudando a avanzar (pereza, despreocupación, etc). En
otros papelillos escribí las actitudes que quería seguir conservando (entusiasmo, energía vital, discernimiento) y también el nombre de
personas con las que deseaba seguir en contacto. Los papelillos con los
nombres de personas y actitudes que quería dejar atrás los puse en un cuenco
metálico y los quemé. Mientras los quemaba agregué un poco de azúcar
granulada (Para mi el azúcar simbolizaba que yo dejaba ir todo eso pero
con dulzura y respeto, sin odiosidad o cargado de negatividad). Luego
de eso tiré los restos (cenizas) al suelo y con una escoba barrí todo hasta la
puerta y luego hasta la calle para que el viento se llevara todo (para
mi la calle es como el mar en dónde el flujo de todos los ríos se funden
en una sola masa de agua, es la conciencia compartida). Los papelillos
con los nombres de las personas y actitudes que quería mantener en mi
vida los guardé en una bolsa pequeña de plástico transparente (de esas que usamos para meter las gominolas), eché azúcar dentro (agregando dulzura al proceso) y sellé la bolsa con un hilo de color
plateado. La bolsa la guardé en un lugar secreto de mi habitación y
así la mantuve durante los 12 meses siguientes.
MIS RESULTADOS
MIS RESULTADOS
Lo único que puedo decir es que las personas cuyos nombres escribí en
los papelillos que indicaban lo que no quería más conmigo, salieron de mi
vida y nunca más los volví a ver. Incluso hubieron personas a las que
nos les dije nada y sencillamente se alejaron. Mis actitudes cambiaron
ese año y no sé si fue precisamente por el ritual pero lo cierto es que
el solo hecho de hacer todo aquello produjo un cambio mental en mi ya
que al hacerlo demostré una real preocupación e interés por cambiar.
Supongo que la energía, voluntad y disposición que puse en el ritual
fue finalmente lo que empujó todo lo demás. Fue mi chispa de intención la que
encendió todo el cambio.
CONSIDERACIONES
CONSIDERACIONES
Yo hice este ritual justo a la medianoche porque
para mi era un gesto simbólico de dar vuelta la página de un período a
otro. Se puede hacer en cualquier fecha, aunque Final de Año o La Noche de San Juan pueden ser días ideales considerando que hay mucha voluntad y fe en el aire, precisamente porque muchísimas personas hacen algo ese día. Lo principal es que sea una fecha importante para ti y que tenga ojalá una carga emocional más intensa. De esta
forma el ritual tendrá muchísimo más poder y compromiso
energético.
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